jueves, 1 de julio de 2010

La luna y el viento


La luna conoció al viento
en su mutuo paso por el desierto.
Y el viento travieso
jugando con la luna y su cansancio;
y su sed y su desánimo
un oasis le ha creado.

Y la luna, enamorada como es ella,
se entusiasmó con el viento,
maravillada por su creación:
un ardiente e intocable paraíso.

... tan para ella, tan lejano...

Extasiada en sus sentidos
se entregó a aquel sueño.

Ante la mirada de la luna
el viento bailó, gozó,
mostró sus encantos más privados.
Incontables oasis le ha creado
para deshacerlos todos
y luego, de la nada y solo para ella,
uno nuevo.

Y la luna enamorada,
radiante, apasionada
se olvidó, perdida ella,
que su paso por la tierra
de un incambiable ciclo dependía.

Y el viento caprichoso
satisfecho en su conquista,
se marchó de aquel desierto
en busca de nuevas tierras,
nuevos besos, nuevas esperanzas.

Una noche, curiosa la vida,
constante y cíclica rotación,
La luna y el viento se encontraron.
Cínicos, nuevos, incontenibles, enteros.

El viento, exitado Don Juan eterno,
prometió a la luna nuevos paraísos;
danzó para ella y revivió sus recuerdos.
Mas, complacido de sí mismo,
no observó a la luna... ese letal rostro.

Y la luna extensa, roja, insaciable,
admiró al sensual y místico viento,
se refrescó en su sueño ardiente
y bebió de este mágico momento.

Mas consciente de ese inasible paraíso,
la luna se despidió rotunda, en silencio.
Puso puntos suspensivos a otro encuentro.

El viento no sería nunca suyo
porque el viento a nadie pertenece.
y lo sabe imagen del paraíso,
sensible, pero intocable, insostenible.

El pasará su vida tocando flores,
mariposas, mujeres, árboles;
y sin embargo, esta será su constante:
no permanecer en nadie.

Y la luna, fiel caminante en su eje
viajará alrededor de la tierra mil veces;
y conquistará poetas, pintores.
y sin embargo; su condena es la misma constante:
el vacío de todo y no permanecer en nadie.

Soberbia, le dedica su último ancho rojo brillo.
SOY AYER

lunes, 14 de junio de 2010

Luna Nueva

Noche de luna nueva:
roja, extensa, en todo su esplendor
Exhibicionista de lo majestuoso,
de la justa soberbia de saberse bella,
naciente, carnosa, tierna, lujuriosa;
callada, virgen, brillante, ancha,toda.

Disfrutas tu noche,
juegueteas con los amantes
y guardas el secreto de sus gritos,
de su humedad, de sus sigilos,
de su metamorfosis de ser dos y uno;
raros los cuerpos que pierden su forma,
entre ustedes no hay decencia u ofensa,
no hay límite y alcances;
solo brillos, jadeos, abrazos, besos...

Eres perfecta alcahueta del poeta enamorado,
que al mirarte moja pluma en tinta
y se dispone a exorcizarse...
De ti? de sí? sólo él lo sabe.
Solo expulsa su alma atormentada,
herida por este diablillo que es el amor,
y se traduce en letras,
ordenanadas o desmesuradas, a quién le importa?
Es como tejer un canto con hilos de sí mismo
que nadie más verá. Solo él y tú

Auguras buena fortuna para el recién nacido,
Eres la expresión de la abundancia,
Acompasaste los gritos de la madre y su pujar
y ahora bañas de luz a ambos,
mirando el goce indescriptible
del pequeño prendido al seno materno
y esta nueva manera de extender el ser,
Esta no resignación del no ser más uno.

Compañía de todos,
incluso del más desafortunado
del que cree que perdido todo
no hay más camino que fundirse,
deshacerse a sí mismo
y despojarse de esta piel que tanto duele.
perfecta tú para elegir cuerda o bala;
aconsejar el acantilado adecuado
o la avenida más transitada.

Luna nueva, rojita, enorme,
Gozas el orgasmo de lo eterno y lo concreto
mas no imaginas el poquito tiempo que queda.
Aprovecha y exorcisa, enamora,
bendice y conduce al fin de quien te ruega.
SOY AYER

jueves, 25 de febrero de 2010

Sin título


Vuelves viajero a tu camino,
justo ahora que mi alcoba sabe tu nombre,
huele tu aroma y reconoce tu piel.

Te vas y en la maleta de lo olvidado
dejas mi nombre, mi esperanza,
mis abrazos, mi aroma
y la voz que hicimos juntos.

Como arquitecto,
diseñaste mi ilusión y
reconstruíste la esperanza en ruinas.
Hiciste de mí un hogar,
un remanso para tus horas cansadas.

Como el viento,
te metiste suave y discreto en mi vida,
sin sentir te hiciste imprescindible.
Necesario, urgente.

Ahora que te vas,
me asfixia tu ausencia
y el vacío exige respuestas.

Mi cuerpo, ahora frío sin tí
reclama el calor
y se niega a la costumbre gélida de la soledad.

Pero eres viajero,
así llegaste, sin querer
así entraste, sin preguntar
y así te vas, sin decir adiós.

SOY AYER

miércoles, 3 de febrero de 2010

Princesa


A MeliSophi, con amor
Cuando veo tus ojitos parece que el cielo se abre,
descubro paso a paso este mundo que ahora es tuyo,
aprendo a decifrar tus sonrisas y tus llantos.

Tu dialecto que se contruye de mi lengua
y pareciera que nos entendemos perfecto
aunque a veces las palabras nos fallan.

Tus bracitos pequeñitos me atrapan
y tu boca salivante me lava la cara.
Esos besos tuyos, la ternura más hermosa.

Tus gritos que a veces me enloquecen,
se convierten en música que festeja.
Qué será esta tu fiesta?
dónde la música que te hace bailar.
Brincos, pasitos, movimientos sublimes y otros toscos...

Te descifro y luego otra vez nueva,
me toca descubrirte entera, distinta...
Si tu risa fuera música,
un concierto serían mi días...

Princesa redondita y cuerpo corto
sueña, vive, descubre
Alimentate de tus libros que tanto gozas,
Disfruta del rabiar de tu pequeño cómplice...

Crece, crece mucho pero no tan rápido
Quiero mirarte, disfrutarte
así de a pasitos como en este día,
como en mi vientre,
cuando nos confundíamos como una sola.

SOY AYER

sábado, 30 de enero de 2010

Noche cibérnetica


Describir la noche que me regalaste
es como entender un cuadro de Dalí.
La fantasía se vistió de verdad
y la lejanía se inventó cercana.
Tus letras fueron tus palabras
y el amor se sintió aquí... tan cerca...
como si la luz del monitor fueran mis velas
y el compás del teclado la suave música.
Y me deje llevar por ti
y de noche me convertí en día
y provoqué lo que hace tiempo deseaba,
pero que por prudencia callé y oculté.
Despertaste la furia silente,
apagada por tanto dolor. Y fui cazadora,
y fui fiera...
Mas la dulzura que guardaba a oscuras
se desbordó y tejió un te quiero y otro más,
Me convertiste en diosa de amor
recibiendo adoración de su siervo y
derramando en ti mis bendiciones y mis anhelos.
Fui todo: sueño, luna desbordada,
fuerza, locura, ternura, pasión.
Y sin tú saberlo, te adherí a mí,
te hice mío,
Pero, como cuento de hadas,
la hora rompió el sueño
Y así, con la excitación de mis olvidados sentidos,
te guarde en mi alma sin permiso,
yen tu almohada a cambio dejé tres besos.
Qué locura! Anoche fuiste todo
aunque en mi día puedas ser nada.

SOY AYER

viernes, 6 de noviembre de 2009

Selva en penumbra


La penumbra se adueñó de la selva,
el sol se negó a visitarla, a seducirla,
a penetrarla.
La oscuridad la abrazó, la hizo suya,
noche perpetua, fría, ausente.
La selva asimiló su nueva vida,
perdió su esencia, no más verdes musgos,
ni arboles erguidos, ni pululantes libélulas.
Y del rosagante amanecer
se convirtió en pálido fantasma.
sus tronquitos carcomidos, cafés,
frágiles, de corteza polvorienta.
Sus enredaderas entre el fango
botaditas como víboras cansadas,
hasta enroscasdas, griscáceas.
Su fauna, mitad muerta, mitad adaptada
se perdieron los colores amarillos,
los naranjas, los rojos o azules.
camuflados con la niebla,
depacito sobreviven estos pobres.
Abandonados, alguno aún clamante.
Solo corre el frío, y no hay agua,
el espeso, blancuzco, pesa sobre la maleza.
Ay de ti selva, tan sola, tan triste, tan vacía!
Pero las palabras tampoco entran
y esta voz se pierde en su intento.
Cuántos días más le quedan?
nadie sabe, hasta que el frío engulla
la poca vida que queda.

sábado, 10 de octubre de 2009

No me reces


Me amas como a Dios la beata;
a él dirige sus pensamientos,
por él realiza sus actos
y reza en su interior a diario
versos, plegarias y cantos.

Y Dios de existir lloraría
porque, quién puede ver al interior del otro?
si escuchándonos no nos entendemos,
mucho menos cuando callamos.

Dios no sabría de esa beata,
ni de todo el amor que profesa
a él no lo toca, no se entera.

Dios moriría de soledad, por hambre de amor;
porque el pensamiento que no se hace palabra
se pierde en la nada;
porque el amor que no toca el cuerpo,
se convierte en ausencia, en sin sentido de piel.

Dios no entendería por qué,
amándolo tanto, lo deja solo?
por qué, si reza tanto, no habla con él?
por qué si siente tanto, no se desborda en sus manos?

Y Dios lloraría, se enfurecería,
se haría pequeño, viejo, triste.
Gritaría, empujaría, aventaría,
para después callar y morir.

No me reces, háblame;
no cantes al aire, házlo conmigo, en mí;
no sientas sólo, desbórdate en mi pecho.
Y hazte presente y hazme real.
Que no soy sagrada, soy pagana.
con labios, con pecho, con vientre, con sexo.

SOY AYER